Ven siéntate a mi lado,
no quiero hablar de amor
no quiero que te enteres
que hay en mi corazón.
Repíteme tu nombre,
con la más dulce voz
y dime que te mueres
por abrazarme amor.
Y dame un beso grande,
muy grande, grande, grande,
como hace muchos labios
no había besado yo.
Y dame lo que quieras,
y no le des más vueltas,
que quiero descubrirte,
en esta habitación.
Hoy no tomes tú tiempo,
que no lo tengo yo,
no quiero convencerte,
de nada y por favor.
No, no me digas te quiero
no me hace falta hoy,
solo quiero perderme,
en tus ojos de sol.
Y dame un beso grande,
muy grande, grande, grande,
como hace ya mil labios,
no había besado yo.
Y dame lo que quieras,
y no me hagas promesas,
que quiero descubrirte,
en esta habitación.
Y dame lo que queda,
al final de la escalera,
enciérrate en tu cuerpo,
y no en tu corazón.
Y dame un beso grande.
Edgar Oceransky
No hay comentarios.:
Publicar un comentario